La historieta de Di Santo al igual que la de Ramírez, tienen (quizás mi pensamiento sea delirante) una doble trama y posible doble final. En ambos casos la trama puede mostrar a dos mediocres jugadores y tener un final que señale que, donde jueguen, no van a destacarse (mas allá de la rachita goleadora de Di Santo). La otra trama y final es la de dos jugadores que, por no estar al día con sus "sueldos" (habría que inventar otro término para denominar lo que cobran mensualmente los jugadores de fútbol), uno no rindió en la medida de las expectativas y el otro vivió de desgarro en desgarro, hasta que, al ser transferidos, uno se cura milagrosamente y deja de lesionarse cada 3/4 partidos y el otro recupera la memoria y se transforma en pieza clave de su nuevo equipo.