Caruso llegó a San Lorenzo y:
Bueno de no meter goles, metió 8.
Gigliotti de no meter goles, metió 7.
El pipi pasó de tener un nivel pobre y lleno de lesiones, a ponerse el equipo al hombro y levantar el nivel.
Alvararo y Bianchi Arce pasaron de ser conitos de entrenamientos a poner huevos.
Puso a Kannemann en el equipo y la rompió (hasta metió el gol de la salvación).
Después de la promoción, hubo un éxodo de jugadores y Caruso se encontró con 8 profesionales en las prácticas. Tranquilamente se podría haber ido también (eramos un barco a la deriva deportiva e institucionalmente) y no lo hizo, se quedó y levantó el teléfono y empezó a llamar a varios jugadores que él dirigió en otros clubes, para ver si venían.
Por gestión propia de él, arregló las llegadas de Prosperi, Gentiletti, Masuero, Mercier, Straqcualursi, Verón y no se si alguno más.
Después de que asumieran LATI, llegaron todos ellos sobre la hora, sin pretemporada y algunos recuperándose de lesiones. Faltando 2 semanas para que arranque el torneo, llegaron Piatti, Jara, Aguiar y el otro uruguayo.
Caruso se las tuvo que arreglar con un plantel casi nuevo, sin pretemporada, sin rodaje y recuperándose de lesiones.
Subió a primera a Correa y Tito Villalba. Ni bien se lesionó el pipi, sugirió a Alan Ruiz para reemplazarlo. Piatti debuta contra Colón mete un gol y una asistencia y se lesiona.
Con ese contexto, se lo destituye y viene Pizzi.
Cada vez que la cabeza de Pizzi estaba en peligro (por los malos resultados), aparecía una racha ganadora que le daba una vida más a JAP.
En definitiva:
El equipo que armó Caruso (DE LA NADA), lo disfrutó Pizzi cuando se recuperaron y tuvieron rodaje y sirvió de base a Bauza para ganar la libertadores.
Enviado desde mi E2306 mediante Tapatalk