Un pésimo negociador
Cuenta la historia que hace un año se reunía gente de San Lorenzo e Independiente para cerrar el pase de Kalinski a dicha institución.
El valor acordado era de un millón de dólares, la gente del rojo no objetaba el precio, lo que quería era pagarlo en cuotas.
Al nombrar la palabra "cuotas", una de las personas encargadas de la negociación por San Lorenzo, expresó, de manera sobradora; "es un jugador, no una licuadora"
La forma en que lo dijo cayó mal, la cuestión es que dicho pase se cayó.
Si se vendía al jugador entraban 15 millones de pesos (aunque fuera en cuotas), nos ahorrabamos otros 4,5 millones de pesos en salarios correspondientes a un año. O sea, hubieramos obtenido casi 20 millones de pesos por Kalinski, un jugador que, finalmente, terminó yéndose gratis.
El mismo negociador es el que pone una clausula irrisoria por Alan Ruiz, y cualquier persona con sentido común decía en este mismo foro, lo compra Colón y lo vende por más guita (como finalmente pasó)
El mismo negociador pone una clausula baja por Cavallaro y puede seguir la lista.
El mismo negociador no puede desprenderse de Prósperi, que a esta altura es más un problema que una solución, o trae a Montero para después liberarlo.
En fin, es una labor tipo gerencial, que, lamentablemente, el negociador no está cumpliendo con la precisión que San Lorenzo necesita.
¿No sería conveniente designar a otra persona para dichas negociaciones?
Incongruente si, a la hora de repasar, se deja pasar lo opción Costa con una excusa poco seria (como hablar de super población del sector) a apenas 2 meses de jugar una final, totalmente disminuidos en ese sector, porque Ortigoza se había lesionado.
Incongruente si se piensa que, a un sector superpoblado como el de la defensa, se le incluye a un Coloccini que llega con 34 años, sin jugar desde febrero, porque su equipo se fue al descenso y porque guarda una amistad con el club.
Me parece que es un tema a revisar.
