Pobre Nacho, pobre Pipi...
Es obvio que aman al club, que querían jugar la Libertadores, dar la vuelta, jugar el Mundial del Clubes... y también es obvio que la diferencia económica es tan grande que, por sus futuros y sus familias, no pueden rechazar esas ofertas.
Me dan pena, porque los entiendo, ya que al final todos haríamos lo mismo, y a la vez sentiríamos lo mismo, esas ganas locas de estr en este momento del Ciclón...
Los quiero hasta el fin de mis días... a Nacho y al Pipi especialmente, junto a Mercier, Buffa, Torri, Genti y Orti: ellos fueron los principales gestores de la Copa! (Aunque, claro, jamás olvidaré al resto, como Villalba, Más, Correa, Matos y el resto!)
GRACIAS ETERNAS!