10-6
PD: peguenle una escuchada a lo que opinaba Spinetta sobre Sumo y Luca Prodan. Insisto que musicalmente es valorable lo que dejó el tano, pero el personaje bardero casi pomelesco que hacía no sirve para nada a mi entender y muchos lo destacan por eso más que por lo innovador que fue en su momento para el rock argentino.