El Real Madrid consiguió ganar por 3-0 al Wolfsburgo y clasificarse a semifinales de Champions por sexta vez consecutiva gracias al 'hat-trick' de Cristiano Ronaldo, que tuvo una noche estelar. Pero hubo también un factor que pudo ser clave en la remontada de ayer.
Y es que el conjunto merengue ensanchó el campo más de lo habitual, es decir, modificó las dimensiones del terreno de juego para que fuese algo más ancho y posibilitar así que hubiese algo más de espacio para las subidas de Marcelo y Carvajal, que fueron determinantes en el día de ayer. De hecho, de las botas del lateral derecho nació precisamente el primer gol y el córner que posibilitó el segundo.
Y nosotros somos los líricos con tres delanteros en la altura...