Messi seguramente es mejor gambeteador, mejor tácticamente, mejor estratégicamente, más veloz, más inteligente, mejor cabeceador, más alto, más fuerte, más rápido, más goleador, más ganador, más querido, más humano, más profesional, le pega mejor con la derecha, le pega mejor con la izquierda, es mejor compañero, mejor persona, mejor padre, mejor esposo, mejor amante, mejor hijo, mejor inversor, tiene más dinero, más contratos, se peina mejor, tiene mejores autos, mejores aviones, mejores relojes, tiene barba cool, se viste increíble y huele increíble, pero jamás va a representar lo que Diego Armando Maradona es para el mundo del fútbol y sobre todo para un país. Eso es lo que no pueden entender e intentan comparar con datos y datos y datos.
Y no importa si luego aparece alguien 100 veces mejor que Messi o más ganador que él, no hay comparación posible con Diego porque los contextos son totalmente distintos. Maradona es muchísimo más que un jugador de fútbol y la combinación de todos los factores para que eso se forme fueron únicos e irrepetibles.
Maradona trasciende el fútbol y se combina con la cultura en un ícono que no tiene parangón en la historia deportiva mundial.