Beto, el cumple del Mono fue ayer, 19, pero tu reconocimiento es merecídisimo, muchas gracias rescatar su figura.
Irusta, además de ser el arquero más veces defendió el arco de San Lorenzo, llegó al CASLA hace casi 60 años, fue maestro de arqueros del semillero como Saja y Orión, pero hasta llegó a trabajar de albañil y cerrajero en el club.
Y siempre firmaba los contratos en blanco, él decía "pongan lo que ustedes creen que tengo que ganar".
Por eso uno no entiende por qué llaman "ídolo" a cualquier pelele golondrina y no se valoran estas glorias que tenemos la suerte de tener vivas todavía.