Muy flojo lo de Los Pumas con ese diminuto homenaje (si se lo puede denominar así) hacia un emblema del deporte nacional y mundial, además de que fue alguien que en reiteradas oportunidades los apoyó, tratándose de un deporte con el que siempre hubo latente una suerte de rivalidad. Qué ganas de llamar la atención para mal al pedo.
Igualmente, me parece, cuando menos, desmesurado dar por hecho que obedeció a una cuestión clasista, como mucha gente está afirmando en las redes. En muchas oportunidades integrantes de la selección argentina de Rugby visitaron a Los Espartanos en diferentes penales. No sé si los jugadores de hoy habrán sido parte de eso, pero plantear un odio de clase inchequeable por la insignificancia de la manera que eligieron despedir públicamente a Maradona no es justo para otros pumas y ex pumas que, si lo tenían, supieron disimular ese odio.