Lo banco por las ganas, pero no me termina de convencer. Es rápido, es vertiginoso, pero no mucho más. Es barullero, va al choque, y no suele terminar bien las jugadas. De todos modos para mí es titular por el simple hecho de que sus únicas virtudes (o las únicas que le pude ver hasta ahora) son lo que necesitamos para cambiar nuestra forma de jugar.