La historia de siempre con este hijo de puta. Cuando le llega la hora de renovar empieza a hacer pucherito, declara forradas, le vendehumo a los giles que compran y encima baja su nivel como para demostrar que tiene la pija grande. Que se vaya a Chile, Arabia Saudita o a la concha de su madre, pero en San Lorenzo no lo quiero más.