El tema con el Pitu es que no te marca diferencias, porque para entrar y tocar en el medio con Orti, con Blanco y Tito al costado eso lo hace cualquier de nosotros. Ultimamente viene haciendo agua arriba, no te pone casi nunca un pase entre líneas (su función, concretamente) y encima se hace costumbre que regala pelotas estúpidas que se convierten en contras para el rival, con el agregado que no te corre ni por puta al tipo al que le regaló la bocha.