Me parece bárbaro que Gallardo haya tomado el modelo San Lorenzo 2014 para afrontar estos partidos. El tipo pone un doble cinco (Ponzio-Kranneviter) para equilibrar la mitad de cancha y atacar con dos volantes ofensivos como Sanchez y Martinez. El gran problema que sospechaba que iban a tener y hoy lo confirmé, es que no tiene jugadores desequilibrantes que puedan desacomodar al rival dentro de un esquema ordenado. En pocas palabras, el Muñeco no tiene un Piatti ni un Correa. Entonces, para tener mayor volúmen de ataque, está obligado a sacar a un cinco y poner a Pisculichi o a un delantero. Esto mismo fue lo que intentó sin grandes resultados y, encima, se descompensó atrás y perdió el partido. Yo si fuese Gallardo en Brasil vuelvo a plantar las dos líneas de cuatro y apuesto a una pelota parada, una aparición por atrás de todos de Sanchez o a una corajeada de Mora.