Mucha bola no le doy a ole, perooo: pero Ortigoza es el que agita contra el rival, hay deudas que piden cantito. “Es para Vélez que lo mira por TV”, hace correr, pegadito al “un minuto de silenciooo”. El vestuario es una locura. Tito Villalba usa una especie de locker como paraavalanchas, y lo derrumba. Fontanini y Kalinski, fanas desde la nursery, toman la batuta. Sorprende Pizzi, copadísimo con el “se mueve para acá, se mueve para allá”, o elevándose, como recién casado, entre las manos del plantel, que luego lo baña y entona “que de la mano, de Juan Antonio...”.. ¿El Amalfitani es Tierra Santa? El cielo no puede esperar...