Lo dice la estadística, y lo dice la experiencia de haber visto a San Lorenzo en toda la temporada, incluso con JAP, este equipo necesita bastantes situaciones de gol para poder convertir, y en estos últimos partidos no ha generado demasiado, ya sea por propia impericia, por dificultades que planteó el rival (Gremio, durísimo) o por no contar con los mejores jugadores por la justificada rotación.