El equivalente de Angel Cappa en la ficción.
Tan fracaso no era, ni menos soberbio y menos banco a delincuentes...
Que en paz descanse...!
Yo hoy cuando me paro como docente ante un grupo de chicos antes del torneo siempre les digo: "Entren, dejen todo y matensen. Pero por sobre todas las cosas entren a la pileta (En mi caso) a divertirse"
Y eso lo aprendí de Don Lucero. Que este maestro descanse en paz...!