Me es indiferente. Pero gracias por el torneo del 2013.
Nos dio más que eso. Le dio lugar a varios pibes, nos dio una identidad de juego con la que el equipo salía a atacar en cualquier cancha y daba gusto verlo. Pero muchos prefieren recordarlo por lo malo nada más.
En mi caso, obviamente me dolió esa salida desprolija y su forma de "cagarse" en el club, pero también le estoy muy agradecido por todo lo arriba mencionado. Por mí que le vaya bien, que le vaya mal, me da igual. Que no vuelva, y gracias por todo.