Parte del "análisis" de uno de los editores de LANCE!Net (la versión online del "Olé brazuca"):
Que esta seja a humilhação deste Mundial e que os alemães levantem o tetra no Maracanã. Que o destino tenha misericórdia e não nos reserve algo ainda pior que isso...
(Por si alguno no lo entiende, dice: "Que esta sea la humillación de este Mundial y que los alemanes logren el tetra en el Maracaná. Que el destino tenga misericordia y no nos reserva algo todavía peor que eso...")
(
http://www.lancenet.com.br/copa-do-mundo/Fiasco-historico-analistas-LANCE-Alemanha_0_1171083024.html)
¿Clarito a qué se refiere con "algo todavía peor que eso", no?
Y después se hacen los que están tan por encima nuestro que ni se preocupan por nosotros...
P.D.: Sobre el debate de las drogas. La verdad no creo que sea verdad, por cosas muy superficiales como que Alemania llegó a las últimas cuatro semifinales y nunca pudo jugar una final... ya con eso sólo como que es díficil creer que usen tan a piacere drogas tan poderosas.
Pero también es un hecho innegable que las "Big Pharma", las grandes desarrolladoras y sobre todo comercializadoras de drogas legales -y semi-legales- se basan incluso hasta el día de hoy, y a pesar del predominio yanqui en casi todo el resto de las disciplinas científicas clave, en Alemania y en Holanda. El desarrollo alcanzado en drogas de aumento del rendimiento por empresas alemanas durante las dos guerras mundiales, sobre todo en la segunda, está absolutamente comprobado. Es decir que con esas bases se podría decir que no sería una locura pensar en el uso exclusivo de drogas tan sofisticadas que no salen en ningún análisis convencional, por parte de deportistas de estos dos países. Yendo al principio de los tiempos para el éxito mundial del fútbol alemán, el caso del Mundial '54: Alemania -occidental- necesitaba rápido un éxito internacional con cartel para mostrarle al mundo, y sobre todo al pueblo mismo, que volvían a la escena como protagonistas, que podían destacarse en algo pero siguiendo las reglas del juego -o sea no invadiendo países y gaseando gente-. Es decir, un nuevo
Berlín '36,
pero esta vez no para mostrar como se habían recuperado de la Primera Guerra Mundial... sino cómo se habían recuperado de la Segunda. O sea lo mismo otra vez
. Y los que conocen de historia del fútbol saben que a la final de esa copa -jugada en el patio trasero de Alemania, que jugó en las dos guerras una "neutralidad útil" para sus élites gobernantes-, en la que Alemania venció 3-2 a la famosísima Hungría de Puskas
dándole vuelta un 0-2 y después de haber perdido contra el mismo equipo en la fase de grupos de ese mismo mundial por 3-8. Los propios alemanes reconocen la importancia histórica de este partido para ellos como nación toda, para sacarlos de la depresión y auto-odio de la inmediata posguerra, y le dicen "Das Wunder von Bern":
el Milagro de Berna. Hasta hicieron películas.
Y eso con una mitad de Alemania nada más... a partir de 1990 se reunificaron (mejor dicho la Occidental se comió a la "comunista" Oriental) y quedaron en las manos de las Big Pharma alemanas todos los desarrollos tristemente célebres de Alemania del Este, Estado al que muchos tildan de "inventor del dóping" (como si el dóping no hubiera existido antes de los '50, pero bueno, algo dice), sino miren el articulito que tiene Wikipedia:
http://en.wikipedia.org/wiki/Doping_in_East_Germany (sí, un sólo artículo exclusivamente dedicado al "Dóping en Alemania Oriental", así que imaginense si no le daban...).
Igual,
como argentinos y sobre todo como compatriotas de Messi, mejor no hablemos tanto de drogas y tratamientos con hormonas y demás, porque ayudamos a destapar una olla que no sé si nos conviene que se destape , pero que sin dudas algún día se va a tener que destapar (con lo que avanza la ciencia, si con los tratamientos que permitieron que quien en Rosario era
la Pulga se conviertiera en la
bestia de 180 minutos sin salir por semana y sin lesionarse casi ni una vez en siete u ocho años al tope de su rendimiento en que se convirtió, imaginensé los monstruos que estarán gestándose ahora en los laboratorios de alto rendimiento deportivo de los equipos europeos más ricos).
P.D.2: Lo que muchos -o todos, aunque sea por algunos instantes- sentimos al ver cómo lloraban y no podían cerrar la boca los brasileños en el Mineirao, en alemán tiene una palabra especial para denominarse, un nombre, "
Schadenfreude". Posta.
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