El poder de los medios en Argentina, está dado por la ignorancia del pueblo.
Nos volvimos en seres no pensantes, en este aspecto. Consumimos las ideas ya elaboradas por otros, y las hacemos propias. Las repetimos convencidos, y ni siquiera nos paramos a pensar si es verdad o no, o si es una verdad a media.
Los medios muchas veces, le dan a la gente lo que quieren escuchar o leer. Y la gente los consume, porque quieren reafirmar sus convicciones previas a que se produzcan las noticias.
Los medios tienen sus intereses, negociados, e inversiones.
Está en cada uno de nosotros, saber separar la noticia y el pescado podrido.
Los hechos son hechos, no los podemos torcer según la ideología que tengamos. Hay cosas innegables, si en un gobierno crece mucho la droga o la inseguridad, no hace falta que un medio nos diga si es verdad o no. Los medios lo pueden atenuar o agravar, a este hecho, pero uno lo ve. Si es público que un gobierno se endeuda, podemos opinar si está mal, o no tan mal, pero el hecho no varía. Ni hablar de los casos de corrupción muy visibles, como puede ser bolsos con guita, filmados, o inmuebles que uno puede ver y tocar.
Gran parte de la grieta política, se jugó en los medios, y mucha gente cree que la influencia fue tal, que los que no piensan como uno, es porque es un "idiota" que se come todo lo que dicen los medio. (por un lado Clarin, por otro C5n Pag 12 tvpública y cadenas oficiales). Y no se puede aceptar que una persona tenga su opinión propia, de un lado y del otro.
Por otra parte, históricamente en latinoamérica, los gobiernos autoritarios (de derecha y de izquierda) intentaron hacer desaparecer a los medios no adictos. También es una constante histórica, que los gobernantes que se encuentran asediados por la justicia, recurran a la retórica de que "son perseguidos políticos" y que los medios son culpables.
Los medios tienen intereses empresariales variados, entrelazados con la política, y non sanctos
y pueden esconder información de un partido político y acentuar lo malo de otro partido político. Pero la realidad no la pueden cambiar, y los que consumimos los medios actuales ( tan venidos a menos en su calidad ) tenemos que apuntar a ver la realidad y no las interpretaciones .