No se si lo notaron, pero el periodismo puede sobrevivir aun sin que estos tipos le den notas, pero si nosotros dejamos de consumir absolutamente todo lo que dicen y publican, automaticamente el medio que los contrata los tiene que echar. De esa manera tal vez dejemos de ver tipos que en vez de periodistas parecen hinchas y no tienen objetividad e incluso fomentan la violencia (casos fernando carlos, forrinella, etc) y profilacticos mala leche como el c*lorado mufa, Ole quema, el gallo vignolo y demas escupitajos.