Todos marcan que no le da un pase a un compañero, lo cual es cierto. Pero además está lento, se lo comen vivo en el medio, lo anticipan o lo enciman siempre porque tarda una eternidad en acomodarse o dar un pase.
La jugada del gol de talleres arranca por una pelota perdida por él, y al final del partido casi nos embocan el segundo por exactamente lo mismo.
Enviado desde mi Lenovo K33b36 mediante Tapatalk