En lo personal me dolió que haya ido a Boca, pero más me dolió las boqueadas que tiro y la rabona de mierda esa.
Si no hubiera hecho eso ya esta, indiferencia y a cuando quiera volver tiene las puertas abiertas.
Yendo a lo deportivo me atrevo a decir que fue el ultimo gran ídolo de los últimos diez o quince años.
Yo creo que fui de los pocos, no sé si el único, que no le tenía bronca por llegar a Boca, porque entendía la situación de él, que en San Pablo no jugaba nunca. Obviamente que si terminaba jugando en Boca, me iba a doler, pero de ahí a putearlo o insultarlo por eso era algo lejano, repito, en lo personal. El problema o la bronca vino después.
Primero llega y empieza con las fotitos, las selfies, las declaraciones de que llegaba a un club único y demás ganzadas. Después, lo que en mi caso terminó de rebalsar el vaso fue el ninguneo, la forreada, el decir que los mejores momentos de su carrera los vivió en Talleres. Cualquier jugador que gana lo que ganó en San Lorenzo no puede nunca decir algo así, es forro y mentiroso. No podés comparar vestir la camiseta de quien sos hincha con jugar en otro club, un grande de la Argentina, salir campeón de América y jugar una final de Mundial de Clubes contra uno de los mejores clubes del mundo como es el Real Madrid. A nivel clubes, es lo máximo que podés aspirar como jugador, jugar una final de Mundial de Clubes y él lo consiguió. Ahí es que uno siente bronca, dolor, ninguneo, forreo, etc. Después, en medio de un momento futbolístico complicado nuestro, de los peores en los últimos años, con un resultado desfavorable, mete una rabona innecesaria para que el hincha de su club de turno lo aplauda y se gane el cariño que hasta ese momento no tenía, porque el hincha de Boca en lineas generales no lo quiere, y tengo ejemplos de amigos hinchas de Boca que no lo pueden ver. Eso que hizo, acrecentó aún más la bronca de todo lo que había boqueado.
Respecto a lo que decís de ídolo, yo lo consideraba claramente un ídolo, pero lamentablemente hizo cosas para que se lo baje de ese mote. No solo alcanza con dejar todo en el club, como él hizo mientras estuvo, también tiene que ver la persona, y como persona él falló. La gente fue contundente la última vez que visitó el NG y quedó absolutamente claro que se le cerraron las puertas. Solo espero que el dirigente de turno, sea Tinelli u otro, no se le ocurra ni por un segundo salir a rescatar a este forro cuando Boca se canse de él y lo deje tirado.