Lo quiero mucho, pero en su última gran decisión sentó las bases de la actualidad que estamos viviendo hoy.
No hay que olvidar que Romeo se hizo cargo de bajarle el pulgar a Heinze (diciendo que no era su momento) y de confirmar a Biaggio, agradeciéndole este último en su conferencia de despedida. Esto solo lo debería descalificar inmediatamente, pero bueno es funcional a la dirigencia...con eso nomás ya se es candidato.