Desde hace ya largo rato que me negaba rotundamente a ver Mad Men básicamente por una cuestión profesional, vivo rodeado de cuentas, clientes, creativos, planificadores, etc, y lo que menos quería es llevar los problemas del día a día a un momento placentero como el de disfrutar de un rato de ocio luego de la jornada laboral. Hasta que me decidí a verla y todo fue todo mucho más allá, me atrapó, me impregnó y me liquidó.
Terminé de verla ayer a la noche luego de casi 2 meses de maratón nocturna y viví cada situación como si la pasara yo, la relacionaba internamente con situaciones cotidianas, viví, sentí y tuve empatía con cada uno de los personajes que conformaron esa historia increíble. Me enojé con los clientes como me enojo con los míos por las mismas boludeces que muestran pero 50 años después, amé a los creativos como lo hago con los que me sacan una sonrisa, adoré y odie a los cuentas por su doble faceta y su capacidad de adaptarse a las situaciones, y obviamente me hundí en el profundo melodrama de cada uno de los personajes con sus historias increíblemente contadas.
Desde ayer a la noche que me la paso llorando como un pelotudo, buscando info, frases, googleando a los actores a ver en que andan, fijándome los lugares icónicos en NY (donde se desarrolla pero no se filma la historia), etc.
A todos nos pegan las historias de manera distinta pero esta fue muy profunda por el vínculo laboral, realmente me trituró y encontré esto que más o menos explica de que va la cosa (habla de otra serie pero es lo mismo) y como intentar superar el cierre de algo que nos completó
https://hipertextual.com/2016/02/anhedonia-psicologiaAhora no me queda otra que añorar lo que fue, e intentar engancharme con otra pero el soltar de Mad Men va a ser durísimo, muy duro.
¿Soy el único al que le cayó la ficha tan fuerte o hay otro al que una serie le pegó duro sea por la historia o por sentirse identificados?