Dejemos de lado por un momento al hijo de re mil putas de Piatti, al que no le conocimos la voz en sus dos pasos por el club, al que se rajó antes de una final de una Libertadores y ahora quiere lo mejor para el club.
El tipo confirmó lo que venían diciendo muchos hace rato. Los mellizos no están integrados en el grupo. Los mellizos tienen privilegios como lo del lugar para estacionar el auto. Muchos se hicieron los boludos cuando fue lo del suegro. Suelen llegar tarde a los entrenamientos cada vez que viajan a Paraguay.
¿Son hiper profesionales? Sí.
¿Está mal que tengan su nutricionista y su kinesiólogo? No, aunque no sea lo habitual.
Estos pibes tienen un problema de conducta. Así como se tienen que quedar a vivir en San Lorenzo, la dirigencia, que siempre miró para el costado hasta que esto, que era cuestión de tiempo, estalló, tiene que arreglarlo.
Así como tienen que limpiar a Coloccini y a Monetti también tienen que poner en vereda a estos pibes.