Para mí es culpa de Torrico en su mayoría. Un arquero no puede jugar atornillado a la línea, dudando tanto en salir. Cualquier arquero joven esa pelota sale corriendo y te la revienta. De hecho, cualquier arquero joven cuando la pelota está lejos del área se para en la medialuna, o por lo menos en el punto del penal, NO EN EL ÁREA CHICA!
Te amo, Torri, pero acá la culpa fue tuya.