Ponele que sea mistica, pero si queres traducirlo, llamalo caudillos. No hay ni medio, y hace rato que nos falta uno, cuando lo cosa viene medianamente brava, estamos hasta las bolas, porque podremos tener cracks, podremos tener pibes que traban con la cabeza, podremos tener al que corre hasta morir, pero no tenemos al que impone respeto y al que habla adentro de la cancha cuando la palometa abunda. Ese caudillo es un central o es un volante central, y en general los tenemos mudos y con cara de invitarte a cenar.