" Yo sí, trabajo para que haya un cambio revolucionario en el sistema, dentro de cinco, diez, veinte años. Participo de los procesos de este sistema, pero considero a este sistema esencialmente perverso y creo que hay que cambiarlo, y ese cambio va a requerir un proceso revolucionario. "
"Hay muchos dirigentes que respeto muchísimo –como Miryam Bregman o el “Pollo” Sobrero-, pero veo mucha careteada."
Noticias: ¿Qué sería esa “careteada”?
Grabois: "Que no se la terminan de creer, no se terminan de creer que están trabajando para una revolución, es una especie de pasatiempo para ellos. Pero sí hay un punto de coincidencia que tengo con ese sector: el rechazo a la esencia de este sistema, yo no creo que el sistema capitalista pueda hacer felices a los seres humanos, aún funcionando bien."