Me hace mas ruido que la gente prefiera que se le pudran los órganos antes que salvarle la vida a otros.
Pero que se yo, capaz estaré loco.
Lo que si, si tanto quilombo para la Tia Graciela, el día que necesite un órgano que renuncie a recibir uno también; porque, vió, el mismo drama que tendría ella lo tienen quienes se lo darían.