La sociedad influye.
El argentino promedio es de pura mentalidad triunfalista, y yendo el año que Argentina no logra un título a nivel mayor desde 1993 fue bajando, un pique muy directo fue la eliminación rápida en Corea-Japón 2002 donde fuimos claros favoritos y sumando las finales oficiales perdidas en 2004, 2005, 2007, 2014 y 2015 hicieron que la gente en general ya pierda casi todo el interés en el seleccionado nacional, concentrándose más en su equipo local (este ejemplo mas que nada en hinchas de equipos populares)