Su bendito padre nos vivió cagando, se observaba una animosidad contra San Lorenzo, con respecto a su hijo todavía no hay muestra para dar una definición, pero hay un dicho que dice a tal palo, tal astilla, en fin, no siempre se cumple, veremos.
Lo jodido del padre era que la forma de llevar el partido era la correcta, o sea se le observaba mucha capacidad, en general sin dejarse engañar pero en jugadas decisivas él cobraba contra San Lorenzo, ahí se equivocaba, a veces muy feo, goles con la mano (de Boca) penales mas grandes que una casa que dejaba sin cobrar, siempre en contra.
Es más cuando le ganamos 4 a 0 a Boca en cancha de Huracan en un gran peludo, igualmente se las ingenió para anularnos un gol válido y tratar de emparejar el partido, hasta que llego un momento que habrá pensado (ya nada puedo hacer) y ahi enderezó su arbitraje.
Un peligro el apellido Lamolina para nosotros pero en fin no prejuzgemos.