Va mal pero extremadamente despacio, casi que llega con lo justo. No era ni para amarila. Con la “fuerza” que mete el pie no hacía ni cosquillas. Lo único que da a entender la falta es la forma en la que dispone la pierna.
Pero lo que es fuerza, intensidad, velocidad, peligrosidad de la jugada, no es ni para amarilla. Malísimo el arbitro.
Igual que se re cague el bostero, muerto pecho frio del orto ese. Debería tener un poco de dignidad e irse de San Lorenzo