No, no se juega el puesto, pero tiene las barbas en remojo y sabe que tiene que mejorar mucho, sobre todo de la mitad para atrás del campo.
Pizzi es al revés de la máxima del fútbol, arma los equipos de adelante para atrás.
Con un poco de suerte y un par de incorporaciones buenas en diciembre, lo puede encaminar Pizzi. No sé si vamos a llegar al campeonato, pero al menos sí hay que apuntar a no bajar del cuarto puesto para clasificar a la próxima Libertadores (en este momento estamos con los mismos puntos que el cuarto de la tabla, pero con peor diferencia de gol). Y terminando entre los 4 primeros, también nos olvidamos de la tabla del promedio.