Victor, me encataria saber desde tu punto de vista como vez la presidencia de Miele, ya que nos agarro casi en banca rota y volvimos a nacer pero en el mundo San Lorenzo quedo muy mal parado x su ultimo año como presidente, desde ya muchas gracias!
Hace un tiempo, en otro post que no recuerdo y ante una consulta similar, respondí citando unas palabras de Adolfo Res respecto a este momento de la actual dirigencia:
"segundas partes nunca fueron buenas". Esa sentencia la podés aplicar en todos los órdenes de la vida, pero en el fútbol es mas certera aun. Y tal vez describa y resuma la gestión de Miele.
Miele llegó al club ganando las elecciones de diciembre 1986, por solo 250 votos. Los socios lo miraban de reojo por su condición de "empresario exitoso" que se involucraba en el fútbol, por eso durante la campaña previa, era favorita la dupla opositora, Savino-Guil. La tendencia se revirtió en los últimos días de la campaña, cuando Miele sorprendió presentando el proyecto para construir el estadio (Savino ya había anticipado que esa no era su prioridad)
Y el tipo cumplió. Con el apoyo necesario y decisivo de la gente, que aportó (aportamos) muchísimo dinero a través de distintos canales, después de 7 años la cancha se hizo. También se levantaron una gran cantidad de juicios. Hubo vaivenes económicos del país, pero se terminó aprovechando la coyuntura del 1 a 1 menemista y finalmente el Nuevo Gasómetro fue realidad. Y como consecuencia directa de tener la casa propia, de la mano llegó el campeonato inolvidable (el más importante para mi) del 95.
En el futbol se armaron buenos planteles, la sabia mano del Bambino fue fundamental. Hubo buenas incorporaciones y aparecieron buenos valores del semillero. Nos acostumbramos a pelear campeonatos, vos sabés bien que nuestra generación era la del "Gracias Ciclón por todo lo que hiciste"; y de repente nos convertimos en protagonistas. Ahí Miele tocó su techo. Era Dios. Pero se cegó.
Su personalidad, muy fuerte, muy temperamental lo ponía siempre al límite del choque. Su trato personalista no admitía discusiones. Vivió siempre en conflicto con todos los referentes de los planteles y al que se quejaba lo limpiaba sin más. No quería que nadie le robe el protagonismo. Y cuando eso ocurre, esos líderes no logran promover un sucesor (tal vez porque se sienten eternos). Huelgan los ejemplos en la historia. Entonces cuando el proceso se desgasta (acordate que gobernó 15 años) la gente quiere otra cosa. La política nacional me da la razón al respecto.
Hubo 2 elecciones (92 y 95) en las cuales no tuvo oposición, no se presentó nadie. Nadie se atrevió a cuestionar su liderazgo. Entonces se creyó el dueño y la cagó. El Waterloo de Miele termina siendo el asunto ISL. Es la gota que rebalsó el vaso,
pero él jamás ocultó su afinidad con las políticas liberales de la época. Fue un producto de los 90, hay que analizarlo con esa perspectiva. En esa época nos convencieron que las privatizaciones eran la llave para insertarnos en el mundo. Y Miele se subió a ese tren: no sólo fue lo de ISL (omito el tema porque es trillado y harto conocido) pero nadie recuerda que las sedes de Avenida La Plata y la de Ciudad Deportiva, además de la explotación de los estacionamientos se habían concesionado por 10 años a empresarios privados.
El 70% de los ingresos potenciales del club llegaron a estar en manos privadas. La empresa "San Lorenzo 2000" (que respondía a "Nuevos Clubes Argentinos") administraba la sede de Avenida La Plata y la de la calle Víctor Martínez (a la que nadie recuerda y ya no existe, al igual que la sede de Galería Jardín y las oficinas de Puerto Madero).
También le concesionó a la tarjeta VISA-Banco Provincia, 6000 plateas de la Sur (acordate que eran carísimas, por eso suelen lucir vacías en cualquier imagen que veas de la época).
Le vendió los carteles de publicidad a una empresa llamada "Estática Internacional" de un paraguayo entonces ignoto, pero que ahora seguro te suena, un tal Carlos Abdo.
Y ni hablemos de los derechos televisivos que le vendió a TyC Sports, que los controló durante años.
Todo eso era una olla a presión y no fue casualidad que haya explotado al mismo tiempo que explotó el país...
Perdón por haberme extendido tanto. Un abrazo y gracias por la confianza!