Sí, y por bastante. No me voy a guiar por el potencial, porque es algo difícil de determinar y está atados a muchos condicionantes.
Dybala acá se pudo hacer dueño del equipo en que jugaba, en una división complicada para un chico de 17 años. Llegó al Palermo y empezó a alternar, hasta que se hizo dueño del equipo, y recién ahí pegó el salto a la Juventus. Tal vez el único paso intermedio que le quedó dar era el de un club mediano de primera, pero tampoco lo perjudicó demasiado.
Correa nunca se pudo hacer dueño del equipo acá. En parte porque jugaba con Romagnoli y Piatti, y en parte también porque era muy irregular y no lograba terminar todo lo que insinuaba. Se fue demasiado pronto a Europa, y encima a un club con exigencias grandes como el reconvertido Atlético de Simeone (y POR Simeone, le pese a quien le pese), que no contempla la posibilidad de poner a un chico sin experiencia a que se curta adentro de la cancha. Ojo, también se equivocó el técnico en algunas ocasiones de no darle más rodaje o incluirlo (como en la final de la Champions 2016), pero hay que entender que el que pierde su futuro es él. Teniendo en cuenta esta situación y lo que Simeone es para el Atlético, Correa hace ya un año debería haber pedido irse cedido a un equipo para ganar minutos, sin importar lo que diga el técnico. Caso contrario tenemos la situación de hoy, donde no juega, por eso no explota y por eso no juega, un circulo vicioso que no termina nunca.